Músicos locos
Si hay algo que tienen en común casi todas las personas del mundo es su afición por la música. Da igual que seas un adolescente con pantalones por la rodilla que escucha reggeaton a todo volumen en su móvil (impasible ante las miradas de odio del resto de pasajeros del metro) o un melómano que cada noche, copa de whisky en mano, disfruta su único momento feliz del día escuchando la misma sinfonía de Beethoven en un tocadiscos de 1963. Todos sentimos algo dentro cuando suena esa canción.
Puede que Bisbal y sus rizos de oro sean todo lo contrario a lo que se entiende por músico, que seguramente un grupo de locos botando balones sepan más de la música y lo que significa de lo que él sabrá nunca. Aunque ¿pueden millones de quiceañeras estar equivocadas? probablemente sí, las hormonas y lo que le hacen al cerebro son algo terrorífico. No creo que tener abdominales de acero o una sonrisa brillante sea un requisito imprescindible para hacer música, aunque viendo los 40 principales parezca todo lo contrario.
Pero ¿quién soy yo para juzgar los gustos de la gente? Al final lo importante es que lo que escuches te haga sentir bien, te haga reir, llorar o bailar. Y si aún no has descubierto qué es lo tuyo para eso estamos aquí, para intentar enseñarte un poco más este maravilloso mundo de música y músicos locos, sin abdominales, pero con la clase que tienen los olvidados de la radio.
Puede que Bisbal y sus rizos de oro sean todo lo contrario a lo que se entiende por músico, que seguramente un grupo de locos botando balones sepan más de la música y lo que significa de lo que él sabrá nunca. Aunque ¿pueden millones de quiceañeras estar equivocadas? probablemente sí, las hormonas y lo que le hacen al cerebro son algo terrorífico. No creo que tener abdominales de acero o una sonrisa brillante sea un requisito imprescindible para hacer música, aunque viendo los 40 principales parezca todo lo contrario.
Pero ¿quién soy yo para juzgar los gustos de la gente? Al final lo importante es que lo que escuches te haga sentir bien, te haga reir, llorar o bailar. Y si aún no has descubierto qué es lo tuyo para eso estamos aquí, para intentar enseñarte un poco más este maravilloso mundo de música y músicos locos, sin abdominales, pero con la clase que tienen los olvidados de la radio.
Etiquetas: Personal
0 Comentarios: Publicar un comentario
Publicar un comentario